jueves, 22 de septiembre de 2011

Volando.


Sentada en el asiento trasero de su auto, la muchacha miraba por la ventanilla, perdida en sus pensamientos. 

El sol del desierto pegaba en su rostro, con fuerza, como intentando atemorizarla con su grandeza, y un patrón interminable se veía a través de ese vidrio... árbol, arbusto, árbol, arbusto…  pero ella ni siquiera se percataba. 

Su mirada estaba lejos, y un asomo de sonrisa se le escapaba.

                                                                                                                   
¿En qué estaría pensando? 

Nunca sabré exactamente, pero seguro estaba volando, extrañándolo con alegría, esperando el momento de verle. Sí, de verle a él…


miércoles, 10 de agosto de 2011

Él la encontró...


El la encontró un día llorando, y le preguntó:


- ¿Por qué lloras?


Ella se enjugó los ojos, lo miró fijamente, arrojó un suspiro y volvió a llorar.


Él, entonces, acercandose a María le tomó una mano, se sentó donde la muchacha mirbaa pasar la corriente del río y volvió a decirle:


- ¿Por qué lloras?


El sol trasponía los montes vecinos, la niebla de la tarde flotaba como un velo de gasa azul, y sólo el monótono ruido del agua interrumpía el silencio.


María exclamó:


- ¡No me preguntes por qué lloro, no me lo preguntes! Pues ni yo sabré contestarte ni tú comprenderme. Hay deseos que se ahogan en nuestra alma de mujer, sin que los revele más que un suspiro; ideas locas que cruzan por nuestra imaginación, sin que ose formularlas el labio, fenómenos incomprensibles de nuestra naturaleza misteriosa, que el hombre no puede ni aún concebir. Te lo ruego, no me preguntes la causa de mi dolor; si te la revelase, acaso de arrancaría una carcajada...





martes, 28 de junio de 2011

La locura

La locura es relativa. Todos tildamos a una persona que no es como nosotros como “loca”, simplemente por el hecho de que somos mayoría... ¿Por qué tenemos que hacer esa exclusión? Si es qué, ¿Acaso no estamos todos un poco locos

Y.. ¿Cómo podemos saber, que las personas locas, no son acaso las sanas, y que nosotros somos los locos, sólo que se trata de una mayoría que no acepta otro tipo de personas?




martes, 7 de junio de 2011

Palabras.


Un par de palabras, pueden cambiar tu mundo. 

 
Cuando dijiste “Te amo” por primera vez, y vi en tus ojos la verdad, el mío cambió.
 

martes, 31 de mayo de 2011

Para todos ustedes, "olvidar"


Hay cosas que te marcan de por vida. Palabras, actos, momentos… que sientes que no podrás olvidar jamás.
El término olvidar esta mal usado en la sociedad.
Todos dicen: “Dios, tengo que olvidarme de él/ella, me hace mal” y comienzan a eliminar a esa persona completamente de sus vidas… en todo sentido. La sacan del celular... del msn… del facebook… la esquivan en la calle… como si fuera a servir de algo.
Y todos piensan que eso esta bien. Cuando la verdad es que no.
Nunca vas a poder olvidar completamente una persona. Las cosas vividas, pensadas.. no se olvidan! Pongamos un simple ejemplo.

“Piensa en un conejo blanco.”

Hasta ahí, todo bien.

“Ahora, quiero que dejes de pensar en el conejo blanco, inténtalo con todas tus fuerzas.”

Aunque intentes con todas tus fuerzas no pensarlo, la imagen del conejo blanco ya esta en tu mente. Y no va a salir… Simplemente debes aceptar que el conejo está ahí. Y no podrás sacarlo porque ya se convirtió en parte de tu memoria.

Así sucede con las personas, con los momentos. No se debe intentar recluir todos esos recuerdos, y ponerlos en el rincón más oscuro de tu mente.
¿Qué hace esto? ¿Qué es lo que hace este vano intento de olvidar algo que no se puede olvidar? Nada, solo lastimar, provocar un ciclo que parece que nunca terminara.
Y es que claro. Recluyes toda esa información, todos esos recuerdos que ruegan salir a la luz, que quieren estar en tu mente, como si ya no existieran.
Pero la triste verdad es que puedes mantenerlos en la oscuridad de tu cerebro sólo por un tiempo determinado, no puedes fingir para siempre que no existen. Por una simple razón. Que esa persona es probable que este cerca de tu vida un largo tiempo. Aunque la tengas eliminada de donde sea, e incluso recluida en lo más oscuro de tus recuerdos, vas a cruzarla por la calle. Alguien, siempre la va a nombrar. Siempre, de una forma u otra aparecerá en tu vida.

Y puedes tomar dos caminos.
Uno, el de intentar “olvidar” lo cual es imposible. Que provocará un ciclo que nunca termina, un aparente bienestar que se rompe continuamente con sólo escuchar su nombre o tener alguna señal de esa persona.
O puedes optar por sacar a la luz esos recuerdos, sentirlos tranquilamente y dejar que ese pinchazo de dolor fluya por un rato, para que después vaya haciéndose cada vez menos y menos importante… hasta casi desaparecer. Aceptar las cosas como son, y lograr ver y poseer esos recuerdos, esos momentos, con una sonrisa porque sucedió… y no con una lágrima porque terminó.
Y así, evitarte tanto dolor y sufrimiento por tanto tiempo, ese ciclo interminable hasta que te das cuenta de que esa no es esa la forma de actuar. Así solo te lastimas a ti mismo, y lastimas a los demás. No es para bien que se tomen ese tipo de acciones, es para lío.




No se puede olvidar una persona que fue importante para ti, nunca. Por el simple hecho de que las vivencias y las alegrías que ha tenido contigo, van a seguir allí en tu cabeza durante el resto de tu vida.
Sólo se asemeja, se acepta la realidad tal cual es. Esa es la forma de aplacar el dolor… Al menos, hasta que llegue un clavo que saque al anterior… Y te des cuenta de que tu sufrimiento no lo valia tanto. Porque lo que llegó, no se compara con nada.


lunes, 30 de mayo de 2011

Felicidad.



Felicidad. Una palabra tan usada… Pero que pocos entienden del todo. ¿Qué es la felicidad?
La felicidad es… Es magia. La magia de llegar a pensar que todo es hermoso, que todo esta bien, que no podrías estar mejor que en ese preciso instante.

Es estar tarareando felizmente una canción mientras vuela tu imaginación… pensar que mañana vas a verlo/a, y sonreír para tus adentros… es reírte solo acordándote de alguna anécdota con amigos que nunca olvidarás.
La felicidad, es escuchar un “Te amo” de tu vieja, es ver como las personas crecen y se superan, es la satisfacción de saber que ayudaste un alma en pena. Es la alegría de acostarte en el pasto a observar la inmensidad del cielo, de correr una carrera a las carcajadas. Es reirte para tus adentros tan solo recordando momentos, es sentir una muestra de cariño sincero de un amigo y que tu dia se alegre. Es poder mirar a los ojos a alguien cuando los dos sienten lo mismo.
Felicidad, es ver nacer y crecer a un hermano. Es la sorpresa de encontrarte con un buen amigo que no veías desde hace tiempo… es cantar recitales en la ducha, es poder dormir a tu antojo.
Es llegar a casa y tener tu comida preferida sobre la mesa, y que todos te saluden con una sonrisa. Que simplemente venga tu perro a saludarte tan feliz como si no te viera desde hace meses. Felicidad es sentir que tienes un hogar, que tienes un lugar al cual perteneces.
Sentir que tienes lo mejor de lo mejor, cuando tal vez no lo sea. Simplemente saber apreciar las pequeñas cosas. Obviar lo malo, no dejar que te afecte, y prestar atención a la luz de tu vida.
Es saber que después de tanto esfuerzo lograste los mejores resultados, o al menos saber que no te equivocaste en tus decisiones. Y si te equivocaste, sonreír nuevamente y aprender de tus errores.
Felicidad es querer todo lo que tienes, sin amargarte por lo que no tienes. Es amar con locura y sin importar nada ni nadie. Es tener alguien que te quiera y te aprecie tal cual eres y por lo que eres, no por lo que se ve. Que te cuide, comprenda y proteja.

Felicidad, es lo que siento en este momento. La más sana, y pura, felicidad.
Muchos, dicen que sólo eres feliz si eres idiota… entonces puedo decir, que ME ENCANTA serlo. Y más aún, si somos idiotas… Juntos.




sábado, 21 de mayo de 2011

Calma.


Como siempre, lo único que logró calmarme fue su abrazo. ¿Y cómo no calmarme? ¿Cómo no ser feliz entre sus brazos?
Quedar atrapada, y que me rodeen suavemente, como si se tratara de una muñeca de porcelana… Sentirme pequeña a su lado, insignificante, tan sólo una niña que necesita protección, soltarme por un momento de mi armadura de hierro, y por una vez estar a merced de alguien… con toda mi confianza puesta en él, en esa persona… dejando que me invada esa sincera necesidad de amor y protección que nunca dejo que entre en mí.
Tan solo dejar de ver el mundo, olvidarlo… y hundirme entre sus brazos, en el mar de mis pensamientos, sintiendo su perfume, que trae tantos recuerdos.


Y al fin, alejarme unos centímetros… toparme con su mirada. Algo mágico cada vez que sucede, un encuentro de dos polos opuestos, de dos miradas que jamás esperaron encontrarse de esa forma…

20/12/10 ~ 20/05/11


martes, 17 de mayo de 2011

Preparados para detonar.


Una Hiroshima que fue imposible evitar detonar. Un secreto sacado a la luz, y la espera de la secuela que esta bomba traería…


Ya después de detonada, después de tanta espera y especulaciones… Las expectativas no son las esperadas, ni se asemejan.
En vez de una catástrofe, una extraña nada, una rara paz reina en el ambiente Una estresante, pero hermosa, paz. Que se resquebraja a veces, pero que juntos volvemos a lograr.


Sólo puedo pensar una cosa: Adiós secreto, adiós adrenalina. los voy a extrañar. Pero al fin... Somos libres...

domingo, 15 de mayo de 2011

Aunque..

Aunque veas que todo se te viene abajo, que la vida es muy difícil, y sientas ganas de mandar todo a volar… Recuerda que nunca es tarde para levantarte y seguir adelante.
Cuando pienses que todo esta mal, que no quieres continuar y te canses de luchar… Recuerda que estoy aquí y sin dudarlo, me puedes llamar.
A pesar de las barreras que el mundo te ponga en tu caminar. A pesar de que creas que los problemas son tantos que no los puedes controlar…  Acuérdate de que nunca estamos solos, y de que siempre conmigo puedes contar.

Aunque creas que nadie te puede ayudar y tengas ganas de llorar, recuerda que conoces a alguien que te quiere y al que le duele verte sufrir, alguien que daría todo por verte feliz, que siempre piensa en ti deseando que nunca te rindas.

Tú sabes que yo siempre estaré para ti. 



Te amo amigo. No te rindas, fuerza.

sábado, 14 de mayo de 2011

Caminos.

No sabemos que nos deparará el destino. No sabemos que cosas pueden venir, que puede llegar a pasarnos. Solo sabemos una cosa: Hoy, tenemos un gran camino por delante.


Y lo recorreremos… Juntos.

Querido diario.



Querido diario:
¿Sabes? Tengo un nudo en el estómago. Que no me abandona en ningún momento… y que se ajusta y ajusta cada vez más, con el correr de los segundos, con el correr de los minutos, a medida que se acerca ese momento, ese gran momento. ¿Qué es lo que me pasa? ¿Nervios, quizás? ¿Culpa? ¿Miedo?
Tanto tiempo esperé. Tanto tiempo con ganas de gritarlo, de salir, de demostrarlo, de al fin poder cumplir el sueño de que todo el mundo sepa lo que tanto escondí. Y  ahora, voy a lograrlo. ¿No debería estar feliz? ¿Saltando de la alegría? Tal vez sería lo lógico.
Lo lamento mucho, pero es que no suelo ser lógica en algunas cuestiones. No puedo estar bien. No es algo que me salga, porque no soy una persona egoísta.
Es decir, obviamente estoy feliz en el fondo… Una etapa nueva esta a punto de abrirse a mis ojos. Muchos van a intentar hacerme caer.. Pero no lo hare. Y si lo hago, me levantare. Porque si, a pesar de eso, va a ser hermoso, poder mostrarnos a la sociedad tal cual somos, que todos sepan cuánto nos amamos… Porque con sólo observarnos cinco minutos, cualquiera se daría cuenta, lo se. Pero hay una cuestión que también conozco. Sé lo que estoy a punto de hacer. Sé que estoy a punto de romper un corazón… Un corazon bueno, que no lo merece. Y espero que no también una buena amistad, sería el colmo.
Me siento un estorbo, ¿Sabes? Siento que lo que hice esta mal, que estoy destruyendo cosas por mi propia felicidad… Pero no puedo desprenderme de él por esto, por no conrarle… No puedo dejarlo, es todo lo que tengo, por favor. Lastimaré un corazón aunque no quiera y me duela, porque es lo correcto. Y porque al fin dejaré de esconderme de todos.
Y lo peor… Sé que a él también le duele. Que no le gusta tanto la idea, que tiene miedo de perderlo. Y lo entiendo perfectamente, valoro y admiro la valentía y el amor que me tiene para poder exponerse así… Y tal vez no sentirse tan bien como debería estarlo.
 Ai, diario. ¿Será que soy egoísta? ¿Será que no estoy pensando en los demás? No lo se, diario, no lo se. No se nada. Salvo una cosa.
Esto, si, esto. Él, fue mi sueño durante mucho tiempo. Y no voy a renunciar ahora, ni nunca. Perdóname si estoy haciendo algo mal, diario. Ya no me interesa, porque con él, estoy feliz.
Yo lo amo.


lunes, 9 de mayo de 2011

Algo por lo que luchar.



Si la soledad te pone contra la pared es hora de escapar sin decir nada. Cuesta caminar cuando te duele el corazón. El viento soplará, se llevará el dolor. Hay tanto más por hacer, no hay tiempo que perder, no cruzaré los brazos.


Son mi vida, mi luz. Gracias por existir.



domingo, 8 de mayo de 2011

Tu, un sueño.

¿Alguna vez tuviste un sueño? Uno de esos imposibles, uno de esos que solo se cumplen cuando duermes y estas en tu mundo de fantasía. De los de películas, esos en que el príncipe azul se fija justo en la pobre niña en la que nadie iba a fijarse nunca.
Bueno… Yo sí.
Y ese sueño, ese sueño eres tú.

Tu, creativo, perspicaz y complicado. Tu, retorcido y un poco raro. Tu, que me haces reir. Tu, que no se con qué saldrás a continuación. Tu, con esas ganas de vivir. Tu, y esa imaginación que nunca acaba. Tu, que quieres dar, sentir, querer. Tu, con la ternura infinita que veo en tus ojos cuando me miras. Tu, me haces sentir tu mejor premio, tu mejor logro… Tu, un amor francés. Tu, esos gestos y palabras. Tu, como si quisieras estar conmigo para siempre. Tu, que me haces creer que soy la persona más importante. Tu, tardes, risas y mates. Tu, veinte de diciembre. Tu, los dos, metidos en nuestra burbuja de amor. Tu,  y yo, en el mundo aparte que se forma cuando estamos solos… Tu, olvidemos todo lo que nos rodea.  Tu, que me comprendes, completas, que me amas. Tu, dos polos opuestos… Que se atraen y que quieren estar juntos. Tu, que me haces amarte cada día un poco más. Tu, que dejas que sea un Tu y yo.

Tu, eres ese príncipe azul de mis sueños. Tu, eres mi sueño. 
Tu, un sueño cumplido,  un sueño prohibido, que jamás imagine.
Y que no quiero que termine nunca…



sábado, 7 de mayo de 2011

Que cómo aprendí.

¿Qué cómo aprendí a vivir, y cuándo aprendí a querer?
¿Qué cómo aprendí a sufrir? ¿Cuándo? ¿Cómo?....no lo sé.

Aprendí a mirar las estrellas, alumbrando los sueños con ellas. A mirar los colores del viento y a sentir el sabor del silencio.
Aprendí a encender ilusiones y a escuchar hablar los corazones, con palabras calladas, con matices de mil sensaciones.
Cuando un día, el dolor tomó mi mano, conocí de frente a la tristeza.
La pena y el llanto se marcharon, al sentir el amor y su grandeza.
La soledad, querida compañera, la que con tanto miedo rechazaba, me mostró la paz y la armonía de los momentos que con ella estaba.
Comprendí, el sentido de la vida, viviendo el amor y la desdicha, sintiendo la alegría y la tristeza, conociendo lo breve de la vida.
Aprendí el valor de la paciencia, a calmar los vientos de mi ira, a llenar con mares de esperanza las zonas más oscuras de mi vida.
Y es así, que aprendí a vivir?

jueves, 5 de mayo de 2011

Una larga historia…


Erase una vez, una historia
Una historia prohibida, una historia a escondidas
Una historia extraña, de risas, llantos, momentos... Cosas que solo tu y yo conocemos a fondo, cosas que nos hicieron tan inseparables como lo somos ahora. 
Y que hoy estoy dispuesta a contar, a expresar, a sentir. 


~ 20/12/10 ~